Aclaración del JUEGO DE LA MEMORIA


Hola a todos, disculpen, la intensión del juego de la Memoria era relatar lo que comemos en cada casa de sus respectivos hogares, la idea es que yo tengo una foto de mi alacena y querría saber cual es la alacenita que guardan en sus casas. Cada uno describe que come, como se da la maña con la cocina y con los alimentos. Lo intentaré hacer-descubrir que todos hagan lo mismo desde aca de una forma fácil y sencilla, algunos saben utiliar el Alt de la máquina pero hotros no saben prenden un play de cualquier grabador.

}Mi pequeña alacena de la cocina esta colgada de la pared, de metal, blanca y en el último estante uno no llega sino es con una silla o una escalera.
el último estante sobresale de los otros y ahí guardo unos cereales, oregano y creo que alugnos fideos perdidos. Hay rodajitas de pan saborizadas, y bueno, todo lo indspensable, cafe, arroz, galletitas saladas y una de una marca en particular que se llaman "de Sésamo" y obviamente tienen trocitos de sésamo.

bueno. agregen sus comentarios.
besos a los que regresan a sus hogares, despues de estar de visita y al doble padre.

6 comentarios:

fedontoto dijo...

mi alacena es de madera,grande y alta.en las puertas chiquitas a la izquierda hay envases plasticos vacios.en el frente,yerba,sal,yuyos variados,medicamentos de toma diaria,arroz....a la derecha,bowls,tes variados,cafe,sopas instantaneas,semillas que tomo todos los dias,en la parte de arriba a las cuales se accede con escalera o silla,olla de fondue y bagña cauda,calentador,mates,fuentes sin uso....mas a la derecha algunos comestibles,focos para luz,,pirotines y mas a la derecha aun!nada!porque son solo puertas que tapan al calefon!

imprenta luz dijo...

en estas épocas las alacenas tienen más o menos lo mismo, aunque a causa de las alturas de cocina no siempre existan como tales. arriba están los libros de recetas, reservorio de ideas y soluciones, multiculturales y reclamo silencioso de la diversidad perdida. Luego vienen los arroces, los fideos. Un tercer estante tiene enseres varios, y lo mismo el cuarto. Termina con harina, sémola, maicena, pan rallado, el tostador. Al lado hay una cesta de tres pisos, con cebollas, papas, zanahorias, y de tanto en tanto acelga, nabos, brocolis. En otra parte hay siempre manzanas, a veces bananas, pomelos, peras, excepcionalmente unas fresas. Un otro mueble guarda café, té, aceite, latas de conserva, caldos, salsa de tomate y tomate al natural y harina y azúcar y sal y otros como se dice abarrotes de repuesto. En una repisa hay las especies de todos los días, numerosas en el lado de la cocina, aunque algunas de tan viejas tienen más sabor en la etiqueta que adentro. Hace poco se incorporó una dotación de chiles mexicanos comprada en Boston, al lado de los ajos que se estaban escapando de la lista. En cuanto a la yerba mate, deambula como fantasma en espera de confirmación, o de sábana para vestirse adecuadamente. No parece, pero esta alacena carente de estructura tiene ocupación cotidiana intensa. Llega la señora casi siempre hambrienta a causa de los desvelos del trabajo, y aumenta la tensión, la actividad se multiplica, las pastas secas se dejan acariciar por las salsas de todo origen, el risotto acepta espárragos u honguitos, lo que venden como salmón ahumado se desplaya exánime junto al tomate, las ensaladas festejan una misteriosa combinación de aceite ajo vinagre pimienta mostaza a cargo de la jefa espiritual*. Problema principal, la cocción a vapor, puesto que no tiene salida, la nube quiero decir y se condensa encima de la cocina, y comienza a llover o a garuar intensamente, como en los cuentos de otrora. Hubo un tiempo de corto circuitos, pero ya se ha solucionado el inconveniente: ahora hay una luz halógena de tanta intensidad que no permite atisbar las gotas. De tanto en tanto el horno calienta pizzas o flammenkuches. Remolachas que se compran cocidas en el mercado y se cortan en rodajas alternan con delgadas láminas de queso. Es el verano por aquí, y de ese modo los rojos y los blancos mitigan la prepotencia del verde ensaladero. Ciertamente, hay momentos de brillo culinario, pero quedan fuera de esta descripción por razones de espacio.

Agraya dijo...

En mi alacena solo hay te y cafe, marihuana y bayaspirinas. Una polenta abierta de mi ex-casa y una miel que debe tener 5 años aprox.-

Y es asi...como la tuya,blanca y de madera...nada mas que esta en mi casa. Como a 50 cuadras de la tuya.-

BEsos

PD: Aguanten las FARC!!!!

Agraya

Agraya dijo...

En mi alacena solo hay te y cafe, marihuana y bayaspirinas. Una polenta abierta de mi ex-casa y una miel que debe tener 5 años aprox.-

Y es asi...como la tuya,blanca y de madera...nada mas que esta en mi casa. Como a 50 cuadras de la tuya.-

BEsos

PD: Aguanten las FARC!!!!

Agraya

Unknown dijo...

Mi alacena es la misma de Tacuarí, la del Luciano...pero hay algunas cosas más, que siempre me gusta tener. Fideos, los amo, porque es mi comida preferida, los podria comer todos los dias sin problemas. Tmb tenemos hongos secos, semillas, una lata de palmitos, aceite de oliva, salsa de soja y aceto. Pimienta negra y sal, condimentos secos, y romero fresco. A veces hay semola y pan rallado. Yerba, azucar y jugos. Hay un espacio para guardar frascos vacios, art. de tocador y servilletas. Y cosas ricas: chocolates y mantecol que no suelen durar mucho!!!
Salsas a veces, para hacer una comida rapida. Y en los cajones del mueble de la cocina siempre tratamos de tener papas, batatas y cebollas, alimentos indispensables para resolver cualquier comida.
Bueno eso, solo algunas cositas más...en la alacena de Tacuarí.

marcos dijo...

no tengo alacena